ALEJANDRO LLEGA AL MUNDO
Como entre sueños oyó la voz velada de la mujer rubia:
- ¡Un niño! ¡Qué hermoso es!
Luego oyó berrear algo que parecía un gato. Adela se reía como una loca. De repente se había quedado pálida y fría, pero experimentaba sobre sus miembros un inmenso relajamiento. "Ya está, ya está. ya pasó todo y no me he muerto", pensó, y este pensamiento le hacía reír a carcajadas. Dijo:
- ¿Cómo es el niño?
- Es rubio y con los ojos azules - dijo la mujer grande.
Sintió que Cecilio la besaba en la frente y cerró los ojos inundada de una dicha próxima y caliente.
Oyó las voces de Mercedes y Cristina. Sonrió y abrió los ojos cuando se acercaron. "Vaya, ya no estoy sola - pensó -. Tengo un hijito precioso"
Como entre sueños oyó la voz velada de la mujer rubia:
- ¡Un niño! ¡Qué hermoso es!
Luego oyó berrear algo que parecía un gato. Adela se reía como una loca. De repente se había quedado pálida y fría, pero experimentaba sobre sus miembros un inmenso relajamiento. "Ya está, ya está. ya pasó todo y no me he muerto", pensó, y este pensamiento le hacía reír a carcajadas. Dijo:
- ¿Cómo es el niño?
- Es rubio y con los ojos azules - dijo la mujer grande.
Sintió que Cecilio la besaba en la frente y cerró los ojos inundada de una dicha próxima y caliente.
Oyó las voces de Mercedes y Cristina. Sonrió y abrió los ojos cuando se acercaron. "Vaya, ya no estoy sola - pensó -. Tengo un hijito precioso"
MIGUEL DELIBES
Mi idolatrado hijo Sisí. (adaptación)
Mi idolatrado hijo Sisí. (adaptación)